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Dios dijo que habría días como este.
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Días de Proverbios
Un día de Proverbios es un día que funciona como Dios lo diseñó. Proverbios, lleno de principios prácticos y pautas, sirve como una brújula que nos guía hacia una conducta ética, relaciones armoniosas y una ética de trabajo diligente. En un día de Proverbios, buscamos sabiduría para cada día. ¿Cómo debo criar a mis hijos? ¿Cómo debo abordar mi trabajo? ¿Cómo debo comportarme con los demás? Proverbios nos brinda ideas y consejos sobre la vida armoniosa, retratando el camino ideal de la integridad, la disciplina y el buen juicio.
Proverbios proporciona principios, no promesas ni fórmulas
-Dr. Steven Lennox
Días de Job
En otros días, el mundo no funciona como debería. La vida virtuosa debería llevar al éxito. Los malvados deberían ser castigados. En un día de Job, servimos al Señor con todo nuestro conocimiento y habilidad, y aun así todo sale mal. Recordamos que Dios no es la única fuerza espiritual que existe. Tenemos un Adversario que merodea como un león buscando a quién devorar (1 Ped. 5:8). A pesar de la fe y rectitud inquebrantables de Job, la aflicción lo atormentó a él y a su familia.
El Libro de Job no presenta un mapa para eliminar el sufrimiento. Más bien, sugiere que Dios está en control y nos ama a pesar de nuestros problemas. Anima al alma afligida a abrazar la paciencia y la perseverancia sin obtener respuestas. Nos insta a mantener una confianza inquebrantable en Dios en medio del torbellino de sufrimiento y confusión. Los días de Job, aunque cubiertos de agonía, refinan nuestro carácter, fortalecen nuestra resistencia y profundizan nuestra comunión espiritual con Dios.
Días de Eclesiastés
En un día de Eclesiastés, nada tiene sentido. La ambigüedad de la vida se alza como una montaña formidable. A pesar de nuestra fe, encontramos la duda acechando a la puerta. Creemos, pero la vida se siente sin sentido ni propósito. Parecemos pequeños e insignificantes en un vasto universo.
El Libro de Eclesiastés resuena con el anhelo de nuestra alma humana de comprender en medio de lo que a menudo parece el vacío y la futilidad de la vida. Refleja la búsqueda humana de significado en un mundo pasajero que abunda en inequidad, incertidumbre y angustia existencial. Esto es lo que podría sentir la vida si no tuviéramos a Dios.
Eclesiastés no proporciona soluciones fáciles ni fórmulas. Nos guía suavemente a abrazar la humildad. Nos invita a confiar en Dios a pesar de los misterios de la vida. Nos llama a “temer a Dios y guardar sus mandamientos,” porque eso es lo único que realmente importa.
Cada uno de estos libros es un faro, una liturgia para guiarnos a través de los diferentes días de nuestra odisea en la tierra. En un día de Proverbios, somos guiados por el camino de la rectitud, la sabiduría y la vida ética, colocando los ladrillos de una vida exitosa y armoniosa. En un día de Job, aprendemos a confiar en Dios a pesar de las injusticias y el sufrimiento de la vida. Durante un día de Eclesiastés, aprendemos humildad y una dependencia total en Dios.