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De Hebreos a las Epístolas Generales
Requisitos de finalización
Esta sección del Nuevo Testamento comienza con el libro de Hebreos y continúa con siete "Epístolas Generales" o "Católicas". En este contexto, "Católica" significa "universal", porque la mayoría de estas cartas no tienen una sola iglesia como audiencia. Estas cartas presentan una variedad de enseñanzas y ética cristianas.
El Sermón de Hebreos
El libro de Hebreos es un texto complejo que enfatiza la superioridad de Cristo y el "nuevo pacto" sobre el sistema sacrificial del Antiguo Testamento. La enseñanza principal es que su audiencia debe perseverar en la fe. De hecho, Hebreos 11 EM a menudo se llama el "capítulo de la fe" del Nuevo Testamento debido al "Salón de la Fe" que presenta.
Para respaldar la instrucción de perseverar en la fe, Hebreos asegura a esta iglesia que Jesús ha cuidado todas sus necesidades de expiación. Jesús es nuestro gran sumo sacerdote que ha ofrecido el sacrificio definitivo por nuestros pecados (Hebreos 4:14-16 EM; 9:11-28 EM). Ya no hay necesidad de un sistema sacrificial terrenal o del templo. Jesús lo pagó todo.
Las Epístolas Generales
Las Epístolas Generales incluyen al menos a Santiago, 1 y 2 Pedro, y Judas. 1, 2 y 3 Juan también forman parte de esta sección de la Biblia, aunque estas cartas están dirigidas a una audiencia específica. Estas cartas ofrecen enseñanzas prácticas para vivir la fe cristiana.
El libro de Santiago es una guía práctica para la vida cristiana, los Proverbios del Nuevo Testamento. Tradicionalmente entendido como el medio hermano de Jesús, la Epístola de Santiago es una colección de sabiduría sobre el comportamiento ético y la conducta moral de los cristianos. A menudo se destaca por su énfasis en la importancia de las obras junto con la fe. Santiago enseña que la fe sin obras está muerta, subrayando la importancia de mostrar una fe viva a través de buenas obras (Santiago 2:14-26 EM). El libro también proporciona sabiduría y orientación sobre cómo manejar pruebas y tentaciones, el uso adecuado de la lengua, y el llamado a la humildad y paciencia.
1 Pedro es una carta escrita por el apóstol Pedro a cristianos que estaban experimentando diversas formas de persecución. Esta epístola está llena de esperanza, ya que Pedro anima a sus lectores a mantenerse firmes en su fe en medio del sufrimiento. Destaca la esperanza viva que los creyentes tienen en Jesucristo y les recuerda su herencia celestial que es imperecedera, incontaminada e inmarcesible (1 Pedro 1:3-4 EM). La carta también contiene instrucciones prácticas para la vida cristiana, alentando a los creyentes a vivir vidas santas, someterse a las autoridades y seguir el ejemplo de Cristo en el sufrimiento.
En 2 Pedro, el apóstol Pedro escribe para advertir a las primeras comunidades cristianas sobre los falsos maestros y sus herejías destructivas que estaban infiltrando las iglesias. Anima a los creyentes a crecer en la gracia y el conocimiento de Jesucristo para evitar ser desviados por doctrinas falsas. Pedro enfatiza la importancia de la palabra profética y asegura a sus lectores la certeza de la segunda venida de Cristo, instándolos a vivir vidas piadosas en anticipación a ese día.
1 Juan es una carta escrita por Juan el anciano para asegurar a los cristianos en su fe y contrarrestar las falsas enseñanzas que habían infiltrado la iglesia. Juan enfatiza los fundamentos de la fe, incluyendo la humanidad y divinidad de Cristo, la importancia de amarse unos a otros y la seguridad de la vida eterna para aquellos que creen en Jesús y aman a sus compañeros creyentes. Uno de los versículos más conocidos en 1 Juan contiene la declaración de que “Dios es amor” (1 Juan 4:7-8 EM).
La segunda carta de Juan es una breve epístola en la que Juan advierte a la iglesia sobre engañadores que estaban difundiendo falsas enseñanzas sobre Jesucristo. Anima a la iglesia a caminar en amor y obediencia a los mandamientos de Dios y a no aceptar ni apoyar de ninguna manera a estos falsos maestros.
3 Juan, otra breve carta, está dirigida a Gayo, un cristiano a quien Juan elogia por su hospitalidad y fidelidad. Juan contrasta la buena conducta de Gayo con el comportamiento de Diótrefes, quien es descrito como un líder de la iglesia que actuaba de manera autocrática y divisiva. La carta enfatiza la importancia de la hospitalidad, especialmente hacia los maestros cristianos itinerantes que viajaban de un lugar a otro.
El libro de Judas es una breve carta escrita por Judas, un hermano de Santiago. Está dirigida a aquellos que son llamados, amados en Dios Padre y guardados para Jesucristo. Al igual que 2 Pedro, Judas advierte a la comunidad cristiana sobre falsos maestros que se habían infiltrado inadvertidamente, desviando a muchos con sus caminos impíos. Judas insta a sus lectores a contender por la fe que fue entregada una vez y para siempre a los santos, y a mantenerse en el amor de Dios mientras esperan la misericordia de Jesucristo que lleva a la vida eterna (Judas 3 EM, 21).