Nuestros teléfonos inteligentes y laptops se han convertido en un portal hacia lo que ocurre en el mundo. Hace apenas cien años, una persona podría pasar toda su vida sin salir de su estado. Ahora, los eventos globales están en la palma de nuestra mano. Este acceso casi instantáneo al mundo abre nuevas posibilidades para la evangelización y el discipulado. Podemos conectarnos y orar por comunidades e individuos de todo el mundo de una manera profundamente personal. Google Maps es solo una de las maneras de hacerlo.
Supongamos que un día despiertas y escuchas sobre otra crisis en el mundo. Esto ocurre a menudo y, si no hemos escuchado sobre una hoy, probablemente exista alguna que no conocemos. Supongamos que te enteras de otra atrocidad, otra guerra o rumor de guerra. Sientes el impulso de orar.
Con Google Maps, puedes navegar virtualmente por las calles de cualquier ciudad o pueblo del mundo, permitiendo una oración más informada y enfocada. Ayuda ver por qué estás orando. Mientras "caminas" por estas áreas en tu pantalla, puedes orar por las necesidades específicas de la comunidad. Puedes orar por la paz. Puedes orar por la restauración de la infraestructura. Puedes orar para que reine la sanación en medio del caos.
A menudo no podemos ver la obra de Dios en las noticias, pero Dios siempre está trabajando. Hay personas que Dios ha ayudado. Hay ayudantes que Dios ha respaldado. La obra del Espíritu a veces brota de lo invisible hasta que irrumpe en la escena con una fuerza poderosa.
Ver por qué estás orando, al menos en parte, puede transformar una historia lejana de las noticias en una intercesión personal. Puede ayudar a cerrar la brecha entre tú y aquellos por quienes oras.
Google Maps no es solo una herramienta para el discipulado personal. Puede usarse para discipular a otros. Al compartir capturas de pantalla o navegar en vivo por áreas necesitadas, puedes guiar a un grupo en una caminata de oración virtual. Esta experiencia compartida puede ser increíblemente poderosa, fomentando unidad y un propósito misional. Hace que lo abstracto sea concreto. Fomenta empatía hacia personas que de otro modo podríamos ignorar. Crea un sentido global del amor de Dios dentro de la comunidad de fe.
Aquí tienes algunas maneras de aprovechar herramientas como estas:
Como hemos visto a lo largo de este curso, el discipulado no se trata solo de adquirir conocimiento. Se trata de ser transformado y luego ser herramientas de Dios para guiar a otros hacia la transformación. Se trata de aplicar lo que aprendemos de una manera que impacte nuestro mundo. Integrar Google Maps en tus ritmos de discipulado demuestra un esfuerzo consciente por conectarte con la historia más amplia de la obra de Dios en el mundo. Implica ir más allá de los límites de nuestro entorno inmediato y abrazar una mentalidad de reino que alcanza los confines de la tierra.