Práctica: ¡Arma una tienda de campaña!

¡Sigue el consejo de la Rev. Megan Koch! Comienza a levantar tu tienda desde este momento. Ni siquiera digas: “Comenzaré mañana.” Comienza ahora mismo. Eso no significa este segundo. Significa el próximo momento divino que ocurra. Tal vez sea ahora mismo. Quizás sea al recoger a los niños de la escuela en una hora.

Después de uno o dos días de “orar” (y levantar tu tienda) “sin cesar” (1 Tes. 5:17 EM), escribe tus reflexiones sobre la experiencia. ¿Puedes sentir al Espíritu cambiándote? ¿Cómo se siente? Escribe tus reflexiones y envíalas a continuación.