Esta lección final contextualiza el discipulado en nuestro mundo contemporáneo. Una iglesia saludable tendrá canales oficiales para el discipulado. Pero puedes discipular y ser discipulado dondequiera que estés. La tecnología no tiene que ser solo una causa de distracción y tentación. Dios puede usarla. Tu teléfono inteligente puede ser una herramienta de discipulado. Google Maps puede ayudarte a interceder por el mundo.
Esta lección tiene como objetivo prepararte para: